El Flúor y los Niños
En cantidades pequeñas, el flúor puede ayudar a mantener saludables los dientes de los niños al prevenir las caries. En la mayoría de las comunidades estadounidenses, el agua potable ya contiene flúor, pues comenzó a agregarse al agua desde hace varios años como un servicio de salud pública. Aun contando con esta ayuda, querrás estar seguro de que tu bebé esté recibiendo diariamente la cantidad suficiente de flúor, siguiendo los sencillos consejos a continuación.
Visita al Dentista o al Médico
Una evaluación de salud bucal debe ser practicada por un profesional de la salud calificado para cuando tu hijo(a) cumpla los 6 meses de edad a más tardar. Tu dentista o médico de cabecera podrá determinar si es necesario un suplemento de flúor.
Utiliza Dentífrico con Flúor
A partir de los 2 años (a menos que el Dentista de tu pequeño haya recomendado que se haga con anterioridad), podrás comenzar a utilizar una pequeña cantidad de dentífrico con flúor e ir aumentándola poco a poco hasta llegar al tamaño de un guisante.
Recibir Tratamientos con Flúor
Si tu Dentista determina que tu hijo(a) presenta un elevado riesgo a las caries, él podrá recomendar tratamientos profesionales con flúor cada seis meses.